LUGARES CON HISTORIA. Por Leandro Madrid.
En los terrenos de la abandonada fábrica de la pólvora-salitre destacan dos construcciones: la fachada del edificio principal, en la calle Acisclo Díaz, y la pequeña ermita-capilla del Salitre, de sencillo estilo barroco del siglo XVIII.
En el edificio principal estaba el despacho del director, con su vivienda, y las oficinas de la secretaría.
La capilla-ermita tiene unos sencillos adornos barrocos en las ventanas de la cúpula y una cruz en la fachada, bajo frontón triangular y enmarcada por pilastras, sobre la puerta de acceso, ya mucho tiempo cerrada.
Hace esquina con las calles Pasos de Santiago y Acisclo Díaz, en un solar separado de los terrenos de la fábrica por una calle de reciente creación. Se encuentra abandonada, llena de pinturas groseras, y en un estado de avanzado deterioro.
El interior lo forma una pequeña nave con cúpula y altar entre pilastras, donde, al parecer, había un Ecce Homo y una Dolorosa. Formaba parte de un Vía Crucis que los Franciscanos de San Diego organizaron en el siglo XVI.
¿A quién corresponde su puesta en valor?