NUESTRO REAL MURCIA. Por Damián Mora.
No era mi amigo en el sentido de mantener una relación de amistad continuada y relativamente íntima. Sí éramos algo más que conocidos. Cuando esporádicamente nos veíamos cruzábamos bastante más que un frío saludo, cortés y educado. En la época en que preparaba mi libro (Corazón grana), me facilitó de su colección particular diversas fotografías suyas y de algunos de sus compañeros de entonces (años 80) y su etapa de juveniles en el Club.
El tiempo que tuve alguna relación con él me pareció una persona introvertida, discreta, sumamente educada, que se abría conforme la conversación iba a más.
Les estoy hablando del jugador de nuestro Real Murcia que más partidos oficiales ha jugado en la historia del Club, entre Primera y Segunda División, (357): José Sánchez Vidaña, “Pepe Vidaña” para todos, que nos ha dejado a los 63 años.
Llegó a Murcia siendo aún juvenil, de Padules (Almería), y se enroló en los juveniles del Club allá por la temporada 1972-73. Ya no se movió de nuestro Real Murcia, aun teniendo ofertas de clubs atractivos como Real Zaragoza, Valencia C.F., y Sevilla F.C., en la mejor época del equipo y del propio jugador, la década de los 80.
Para él esta era su tierra y así se lo reconocía la afición murcianista durante su etapa de jugador y posteriormente, ya retirado, como entrenador. Al punto de que muchos pensaban que había nacido en Murcia, al igual que lo hicieron otros jugadores muy queridos por la afición y compañeros de Pepe Vidaña como Patricio Pelegrín, Chuchi García etc., también tristemente desaparecidos ya.
Tras el salto de juveniles al primer equipo coincidió con la flor y nata de jugadores del Real Murcia de los 80 que militaban en Primera División: Guina, Figueroa, Tendillo, Tente Sánchez, Manolo, Echevarría etc., y pronto accedió a la escarapela de capitán, que ya no soltó hasta su retirada.
Con su inseparable compañero y, sobre todo, amigo, Manu Núñez, dirigían la escuela infantil de fútbol de la Federación murciana en el campo de José Barnés cuando le sorprendió esa maldita enfermedad que no avisa y si lo hace, casi siempre es tarde.
En esta ocasión el Consejo de Administración del Real Murcia ha reaccionado a tiempo y le ha concedido a la puerta nº6 del Estadio (nº de dorsal de Vidaña en su trayectoria con el equipo) el nombre de “Pepe Vidaña”. Lo merecía.
Pepe, sabías que…
los ángeles te envían
señales para decirte que están
a tu lado…
plumas, destellos de luz,
cambios de temperatura,
olores y música.
Quien pasó por nuestra vida y dejó luz ha de resplandecer en nuestra alma para toda la eternidad.
Descansa en paz, Pepe Vidaña.