“La música es una de las mejores herramientas sanadoras del planeta”

Sara Zamora, finalista del Festival de San Remo Senior

Entrevista, por Ángela M. Torralba


¿Qué tal tu experiencia en el Festival de San Remo Senior?

Muy positiva en el sentido de que me he enfrentado a uno de mis miedos, que era participar en un concurso porque nunca me ha gustado. Mi gente me anima para que participe en estos formatos, pero no me gusta que haya un jurado que no se dedica a la profesión decidiendo si lo hago bien o mal. Aunque el Festival de San Remo es diferente. Me enfrenté con otros compañeros de entre 34 y 59 años en la categoría senior. Había gente de todos los países. Pasamos cuatro días como en Gran Hermano, con todos en el hotel compartiendo la misma emoción. 

¿Te esperabas quedar segunda?

No, había mucho nivel. Primero me seleccionaron entre 900 participantes. Luego concursé con otros 66 muy buenos.

Debió de ser una sorpresa, teniendo en cuenta que en los festivales prevalece otro tipo de música más actual.

Sí, el reto era hacer música soul, en inglés y viniendo de Murcia. Me han dado mucha caña. Nadie hizo música negra o soul. Todo era pop, algún bolero… Pero creo que esto fue lo que marcó la diferencia y por eso me valoraron mejor.

¿Y has participado en algún otro concurso?

Sí, el año pasado me presenté a los Premios de la Música de la Región de Murcia y gané. Por eso este año he sido la maestra de ceremonias. 

Con toda esta proyección de la que me hablas debes tener mucho trabajo. 

Afortunadamente sí. Antes era profesora de infantil en Molina de Segura. Me dejé el trabajo el junio pasado porque ahora puedo dedicarme en cuerpo y alma a la música. He despegado en este mundo a mis 37 años con giras por toda España. 

Poniendo tus raíces en el soul y el jazz, ¿cuál dirías que es tu elemento distintivo en el género?

Hacer lo que me da la gana. En el mundo del jazz hay gente muy elitista y si no haces lo que dice la doctrina, no entras. Entonces, hago lo que me apetece. Es música hecha a mi manera. 

¿Por qué en inglés?

Ten en cuenta que he crecido con el soul de los ’90. En la radio nos ponían Whitney Huston, Michael Jackson, Céline Dion… y en mi casa, mi padre escuchaba LPs de música en inglés, me dormía con canciones de Lionel Richie y Phil Collins. No entiendo la música de otra manera.

Has comentado en otras entrevistas que compusiste tu segundo disco, TIME, durante la pandemia. ¿Vivir esos momentos de crisis hizo que cambiara tu manera de entender la música o se reforzaron tus creencias previas?

Qué pregunta tan interesante. Diría que reforzó mis creencias. Mi primer disco se grabó con una big band, es un producto más jazzístico. Pero este segundo lo hice de corazón, con mis influencias reales. Es un gusto hacer un trabajo así, de manera libre. Es la clave del éxito. 

¿Crees en la música como elemento de sanación? Especialmente sabiendo que nació en la pandemia. 

No encuentro otra manera mejor de decirlo. Todo el mundo tiene una canción que le recuerda a algo especial. Creo que la música es una de las mejores herramientas sanadoras del planeta, por eso hay que hacerla bien. 

Es evidente que vamos hacia lo contrario, un mundo musical con canciones virales, likes, estilos homogéneos… ¿Qué haces para mantenerte fiel a tu esencia?

Pasa una cosa con las redes: a veces hacemos publicaciones muy trabajadas que no tienen éxito, pero cuando haces una siendo tú mismo, triunfas. Al contrario que se piensa, la naturalidad y sencillez llegan a la gente. Yo hago música que no es nada actual, sin embargo, está funcionando. Por algo será. De qué te sirven un puñado de likes si esa gente no va a pagar una entrada para ir a verte. Hacen una música que no tiene carisma. Se está promocionando la ley del mínimo esfuerzo.

Entonces, ¿te inspira algo de la música mainstream?

Absolutamente nada. Lo único actual que uso son las herramientas de trabajo, la ingeniería que hay detrás de una producción. De los estilos musicales actuales no me inspira nada porque, además, se han ido perdiendo las grandes voces y el esfuerzo. 

¿Te planteas seguir las modas y cambiar de género?

Jamás. Me lo suelen preguntar. No haría reggaetón ni por todo el oro del mundo. 

¿Cómo es tu proceso de composición?

Las musas llegan. Me pasó con el tema All I want is dancing, que habla de los complejos físicos que acarreamos las mujeres, fregando los platos. Me poseyó una melodía y tuve que dejar los cacharros e irme a grabar con el móvil. Este fenómeno se llama «pequeños destellos». Luego este talento hay que trabajarlo, pero está ahí. 

¿Qué me puedes contar del panorama del soul y el jazz actual en España?

Es muy bueno, sobre todo en el jazz. Hay grupos muy interesantes y gente nueva con grandes proyectos. En Murcia la situación es más delicada porque, aunque hay muchos festivales de esta temática, el público sigue siendo mayor. Ahora está empezando a venir gente más joven. 

¿Y qué papel te gustaría desempeñar dentro de este panorama?

Seguir viviendo de esto dignamente. Quiero ser mayor, con mis arrugas, y seguir en los escenarios recorriendo el mundo. 

¿Dónde pueden nuestros lectores ir a escucharte?

El día 24 de enero actúo en la Puerta Falsa. 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.